jueves, julio 12

El Mirador de la calle Plateros de San Pedro

Lima era la ciudad de los miradores, construcciones que sobresalían sobre las casonas de la ciudad, que permitían a sus propietarios tener una vista privilegiada y a los comerciantes saber si el barco con su mercadería se aproximaba al Callao.

Casona y Mirador de la esquina de Plateros de San Pedro y Bodegones (1)

Sin embargo, con el pasar de los años, debido al "progreso urbano" de la ciudad, se demolieron muchas de estas casonas, quedando solo unos contados ejemplares de este tipo de construcción que caracterizaba nuestra ciudad. Quizá el mas famoso actualmente, es el mirador de la Casa de Osambela, en el Jr. Conde de Superunda (no obstante ser una reconstrucción que data de la década del 60 del siglo XX); otro mirador que aun resiste el paso de los años es el de la casona frente a la plazuela de Baratillo, en el Rímac, casa que perteneció al Marques de Montesclaros.

En un articulo anterior hablamos acerca de la función de los miradores, su probable origen y algunos que ya no existen, pero no hablamos de uno muy peculiar y del cual felizmente hay mucho material gráfico. Es el de la esquina de la calle Plateros de San Pedro y Bodegones.

En el libro "Testimonio de Perú 1838-1842" de Jacobo Tschudi, aparece una acuarela de J. Wayne de este mirador de la calle Plateros de San Pedro. Mas adelante, durante la visita a Lima del militar ingles George W. Carleton, aproximadamente en 1866, registra en dibujos muchos aspectos de la ciudad, como personajes, curiosidades y arquitectura, y también nos muestra el aspecto del mirador de nuestra historia, que por esos años ya tenia al frente al hotel Maury. También aparece en un dibujo rotulado como "Calle de Coca y Bodegones" del libro "Lima, apuntes históricos, descriptivos, estadísticos y de Costumbres" de Manuel A. Fuentes. De igual manera aparece en postales de esta zona de la ciudad, como el que publicamos, del antiguo edificio del Banco Popular.


Acuarela de J. Wayne, aprox. 1838 (2)

Dibujo de George Carleton, aprox. 1866

Dibujo de un libro de Manuel A. Fuentes, donde vemos el mirador en un circulo azul.

Postal del Banco Popular, aprox. 1910, a la izquierda el mirador.

La casa del mirador, ubicada en esta estratégica y de seguro comercial esquina (estaba a una sola cuadra de la Plaza Mayor y frente al renombrado hotel Maury), tenia una tienda en el primer piso, donde según una foto de Courret, fechada aproximadamente entre 1868-1870 y que pertenece a la colección Dammert-Elguera, nos muestra que funcionaba allí una tienda de calzados.

Plateros de San Pedro y Bodegones. Colección Dammert-Elguera (6)

Entrado el siglo XX, y gracias a guías comerciales de la época y de la fotografía por supuesto, encontramos que allí funciono el local del renombrado negocio chino Wing On Chong Co., una de las principales importadoras en el Perú y también de las mas antiguas y de mas larga duración (desde 1862 hasta 1971).

Wing On Chong Co.

Interior de la tienda Wing On Chong Co.

Perdemos el rastro a la casona y al mirador, es probable que haya tenido modificaciones entre 1930 y 1940 desapareciendo el pintoresco mirador, solo conservando la casona sus dos pisos, hasta la década del 60 en que se demuele la casona completamente para la construcción de un edificio donde hubo un hotel, el Damasco, que hoy tampoco funciona.

Tal es la historia y avatares de esta casona y su pintoresco mirador, una historia que de seguro se repitió con tantos miradores desaparecidos de Lima, sellos característicos de su arquitectura, que hoy ya no lo es mas.

* Agradecimiento al Sr. José Cerna Sabogal por las fotos (1), (2) y (6)

Fotos (excepto las anteriores): Google Imágenes

3 comments:

David Pino dijo...

No, en esta esquina se construyo un hotel, llamado Damasco, que en la actualidad esta cerrado. Es frente al hotel Maury, esquinas de Carabaya y Ucayali.

GREHAMLI74 dijo...

Es una pena que por el "progreso urbano" se hayan perdido, parte de la belleza arquitectónica de Lima.

Unknown dijo...

Una historia que se fue, que no perduró con los años, de nuestra vieja y querida Lima.